“Cómete el mundo, antes de que él te coma a ti”
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| Reinterpretación de la obra "Falso" de René Almanza |
Al indagar por la red, me encontré con un artista que me llamó mucho la atención, René Almanza, artista contemporáneo de México; éste tiene la particularidad que para la creación de sus obras utiliza por completo sus manos, y al decir esto me refiero a todos sus dedos.
Almanza,
creó unos guantes en los cuales incrusta lápices de grafito en cada uno de sus
dedos, lo cual le permitió ver distintas cosas del dibujo que antes no
apreciaba desde otros puntos de perspectiva y crear cosas totalmente distintas
en el espacio. Por eso así realiza la mayoría de sus obras últimamente. Obras
minimalistas, muy sencillas, pero bien agradables a la vista.
Debido
a mi insatisfacción por la poca información referente a sus obras, logro
contactar vía correo electrónico a este artista con la finalidad de averiguar
un poco más sobre sus trabajos, en específico, sobre su obra “Falso” de óleo
sobre lienzo, pieza muy temprana de sus trabajos, la cual creó en el 2004.
Con
respecto a su obra, me comenta que vivimos en tiempos donde es difícil saber la
procedencia de las cosas, donde no sabemos qué consumimos, desde la comida hasta
lo que nuestra mente recibe y que todo se falsea, por lo que esta
artificialidad termina destruyéndonos y confundiéndonos.
La obra “Falso” se trata de un
hombre que intenta comerse una simple caja sostenida por sus manos, la cual
representa la falsedad de su entorno y esto conlleva a su destrucción.
Escogí
esta obra debido a que fue una de las primeras que me atrajo de este artista,
sobre todo su nombre y lo que este representa. Allí es cuando me pregunté: ¿Por
qué falso? ¿Qué es lo que nos destruye a nosotros y al mundo?
Lo
cierto es que la humanidad está asociada a la destrucción, somos un vivo ejemplo
de cómo estamos destruyendo al mundo a largo plazo. El odio, rencor, venganza y
la maldad, colaboran a destruirnos unos a otros.
Es
por eso que nos hemos vuelto adictos sin darnos cuenta a cosas como el alcohol,
drogas y cigarrillos, que nos destruyen. Porque somos adictos a lo que nos
destruye.
Somos
adictos a la destrucción porque estamos vivos. Y así se dice que la primera
causa de la muerte, es nacer.
La
sociedad está dispuesta a manipular a su antojo y conveniencia todo lo que le
rodea, en consecuencia, todo tiene un doble sentido y lo que es riqueza para
unos, es pobreza para otros. Desde guerras mundiales que benefician a unos y
les hacen daño a otros.
En la creación de este
trabajo, decidí presentar a un hombre en plena destrucción sin llegar a su
totalidad. Conserve los colores de su piel, pero en tonos más oscuros y
desgastados, además de toques de color rojo, para representar la sangre
derramada por quienes son adictos a su día a día.
Este
es un hombre que representa a la humanidad.
Entre
sus manos maltratadas, sostiene sus desventajas e impurezas, sus miedos y
temores, sus más grandes adicciones, sus peores acciones y pecados.
Sostiene
su realidad, la parte mala de la realidad de la humanidad, que muchos no
quieren reconocer. Por lo que reemplacé la caja original, por el planeta
tierra; su entorno. Y a causa de todo esto, pretende comerse el mundo, antes de
que el mundo se lo coma a él.
Para
el fondo, conservé también su color rojo, pero este es mucho más dinámico. Posee
palabras que dan a entender todo lo que a mi perspectiva y la perspectiva de
otros, que colaboraron desde su punto de vista, es lo que los destruye, lo que
destruye a la humanidad y por ende, al mundo.
Palabras
como fracaso, dolor, mentira, guerra, amor, tecnología, olvido, rechazo,
prejuicio, sociedad, quejas, falsedad, suciedad, soledad, vacío, depresión,
religión, intolerancia, enfermedad, ignorancia, avaricia, discriminación,
racismo, obesidad, extremista, desigualdad, infidelidad, incomprensión,
deslealtad, posesividad e injusticia. Con lo cual quise plasmar la cantidad de
daño que hacemos al mundo y a nosotros mismos como sociedad.
Y
que al tener todo esto en nuestras manos, tenemos la posibilidad de cambiarlo.
Pero sin duda alguna, el cambio empieza por uno, yo empecé exponiéndonos a la
realidad.
Pero
uno solo no hace el cambio.
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Cosas que se hacen con cariño: “Cómete el mundo, antes de que él te coma a ti” por mi, Deborath Delgado. x
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